Escultura gótica de una calavera que no ve nada, no dice nada...
Un giro mortificante y delicuescente de una frase bien conocida. Al mismo tiempo, nos sentimos amordazados, cegados y ensordecidos por la oscuridad de la muerte que se cierne en el horizonte. No debemos hablar del mal, pero estamos dispuestos a gritar alto y claro sobre este siniestro dibujo.
Una escultura decorativa de resina pintada a mano con todo lujo de detalles, perfecta para tu escritorio como pisapapeles rockero o como objeto puramente decorativo para alegrar tu hogar. Este artículo ha sido moldeado a partir de una escultura de arcilla original, creada con mucho cariño por un experto artista tridimensional.